Los coches eléctricos se van abriendo paso en el mercado. Sin embargo, la infraestructura de recarga (electrolineras y puntos de recarga) no crece al mismo ritmo. El Barómetro de la electromovilidad presentado por ANFAC (Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones) señala que a finales de 2022 encontramos unos 16.500 puntos de recarga para coche eléctrico en España.
Parecerían buenas cifras si no fuera porque en nuestro país se han matriculado más de 150.000 vehículos eléctricos e híbridos enchufables. La fuente revela que el 60% de los propietarios de vehículos electrificados no cuenta con un garaje para instalar un punto de recarga. En otras palabras, cerca de 90.000 usuarios tienen que recurrir a puntos de recarga públicos.
Y basta una sencilla cuenta para descubrir que la infraestructura de recarga apenas es capaz de abastecer al 10% de los coches electrificados matriculados en España. A ello hemos de sumarle el lento crecimiento de electrolineras y puntos de recarga públicos. Además, la mayoría de nuevos cargadores tienen potencias iguales o inferiores a los 22 kW.
En cifras, apenas el 20% de la infraestructura pública cuenta con potencias superiores a los 22 kW. Si eres usuario de un coche eléctrico y tienes un punto de recarga doméstico, estás de suerte. Pese a ello, es más que probable que, ante un apuro o durante largos viajes, tengas que recurrir a puntos de recarga público o electrolineras, así que vamos a darte alguna información clave.
El término electrolinera no entraña ningún misterio: electricidad + gasolinera. Una electrolinera es una estación de servicio provista de varios puntos de recarga para coches eléctricos e híbridos enchufables. Además, ofrecen otros servicios. Dicho de otra forma, un punto de recarga no es una electrolinera, pero las electrolineras cuentan con varios puntos de recarga.
Por desgracia, la red actual de electrolineras es bastante escasa. Sí, mucho menor que la infraestructura de puntos de recarga. Todo apunta a que la cosa cambiará a partir de 2023, pero eso está por ver. Cabe destacar que, el siguiente paso a las electrolineras son las fotolineras o electrolineras solares. En esencia, se trata de estaciones de recarga para vehículos eléctricos cuya energía proviene de placas solares.
Gracias a que utilizan energía limpia de recarga, son 100% eficientes: emplean energía solar que es renovable y no contamina. Las placas solares se instalan sobre el techo de la estación de servicio y su funcionamiento es simple:
Podemos encontrar, a su vez, dos tipos de electrolineras solares:
Las electrolineras y las fotolineras tienen muchos puntos en común:
Sin embargo, las fotolineras suman algunas ventajas adicionales que no está de más tener en cuenta. Sin ir más lejos, emplean energía 100% renovable, no desperdician la energía, sino que la almacenan; y el sistema permite vender a la red la energía generada que no se utiliza. Básicamente, como si instalas paneles solares en tu vivienda.
Recargar el coche eléctrico en una electrolinera es tremendamente sencillo. El proceso es igual que en cualquier otro punto de recarga. Solo tienes que aparcar el coche junto al punto de recarga, conectar el cable y activar el punto de recarga. Esto suele hacerse a través de la aplicación móvil de la distribuidora de energía. Tenemos Endesa X, Thunder, Repsol, Iberdrola, Ionity…
Lo mismo ocurre con el pago. Este se lleva a cabo mediante la tarjeta de activación del punto de recarga o a través de la propia app. Por si tienes dudas acerca de cómo cargar un coche eléctrico, te dejamos este práctico vídeo:
Las electrolineras, al igual que los puntos de recarga, se encuentran distribuidos por las diferentes comunidades autónomas. Si quieres localizarlas, tienes varias opciones:
La instalación de puntos de recarga públicos es una asignatura pendiente por parte de las Administraciones. Si queremos cumplir lo establecido en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) 2021-2030, hay que ponerse las pilas. Para ello nace el Real Decreto-ley 29/2021. Este dará un fuerte impulso a la infraestructura de puntos de recarga públicos a partir del 1 de enero de 2023.
El objetivo es cumplir con los planes del Gobierno de alcanzar los 100.000 puntos de carga públicos en 2023. Es complicado, pero para ello se tomarán dos vías: instalación masiva de puntos de recarga y una reducción del dilatado proceso de tramitación de licencias y conexión a la red.
Este artículo establece que, antes del 1 de enero de 2023:
Todos los edificios de uso distinto al residencial privado que cuenten con una zona de uso aparcamiento con más de 20 plazas, ya sea en el interior o en un espacio exterior adscrito, así como en los estacionamientos existentes no adscritos a edificios con más de 20 plazas, deberán de disponer de las siguientes dotaciones de infraestructura de recarga de vehículos eléctricos:
Están exentos de esta obligación los edificios protegidos por su valor arquitectónico o histórico, a fin de garantizar su conservación. El problema es que no se han establecido duras sanciones por incumplimiento. Dicho esto, veremos cuántas estaciones de servicio cumplen con la normativa…
Por otra parte vtenemos la Ley 7/2021 de Cambio Climático y Transición Energética. Fue aprobada en mayo de 2021. Dicha ley obliga a más de 1.000 gasolineras a equipar sus instalaciones con, al menos, un punto de recarga:
No tendrán que hacer dicha instalación aquellas que ya cuentan con puntos de recarga. También se librarán aquellas que, por seguridad, no puedan instalarlo; así como las que no puedan llevar a cabo la cometida eléctrica.
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